1.3 Fundamentos para esta publicación

¿Por qué la IASA publica este documento ahora, al final de la era de los soportes audiovisuales tradicionales?

Es verdad que una parte considerable de los acervos de audio y de video1 en el ámbito mundial – típicamente aquellos que son propiedad de radiodifusoras y archivos nacionales de países ricos – ya han sido digitalizados, o están en proceso de digitalizarse para su preservación a largo plazo. Aunque la nueva metodología para la preservación audiovisual a largo plazo fue aceptada universalmente hacia finales del siglo xx, aún queda una parte considerable del legado audiovisual almacenada en los soportes originales. La razón principal es, obviamente, la carencia de recursos. Pero también falta un sentido de urgencia para completar la digitalización del contenido.

Hay una ventana de tiempo en constante reducción para completar el proceso de digitalización antes de que desaparezca el precario número de equipos reproductores en condiciones operables, requeridos para la lectura de formatos tradicionales. Actualmente, esta ventana se estima entre 10 y 15 años,2 lo que hace imperativo la provisión de condiciones óptimas de almacenamiento. Esto es particularmente importante para los archivos en zonas climáticas húmedas y calientes. El propósito de esta publicación es asistir a los archivos y repositorios para optimizar las condiciones de almacenamiento, como una medida temporal, antes de que la preservación profesional a largo plazo, por medio de la digitalización, pueda financiarse y organizarse.

Además, optimizar la esperanza de vida ayuda a que los archivos sigan las recomendaciones de la IASA-TC 03 para mantener los originales en un almacenamiento adecuado después de haberse digitalizado y como un resguardo ante los avances técnicos, haciendo posible la creación de mejores copias.

Sin embargo, bajo ninguna circunstancia deben considerarse estos lineamientos como una solución absoluta. Es peligroso suponer que la conservación convencional (preservación pasiva) puede ser un método viable para lograr la conservación a largo plazo, por ejemplo, de una colección de medios en diversos soportes. Inevitablemente el deterioro será progresivo y finalmente limitará la recuperación de los contenidos almacenados. Una amenaza aun mayor es la creciente dificultad para conseguir equipo de reproducción en buenas condiciones de funcionamiento y encontrar repuestos para mantenerlo en operación. Para muchos formatos sobre cinta la escasez de equipo ya es muy severa. Tarde o temprano, incluso los soportes preservados con mayor cuidado se volverán totalmente irreproducibles. La preservación activa, siguiendo los lineamientos de IASA-TC 03 y IASA-TC 04, es absolutamente imperativa.


1 En el ámbito mundial los acervos de los archivos de audio y video se calculan en cerca de 200 millones de horas. Esta cifra considera la existencia de múltiples copias de un solo original.

2 Por lo general, para los documentos con soporte en cinta magnética la ventana de tiempo puede ser más corta; para los soportes mecánicos y ópticos probablemente más larga.